Las artesanías y la escultura forma parte de la cultura y tradición de San Antonio de Ibarra

Segundo Montesdeoca, artesano tallador de esculturas en
madera en San Antonio, población declarada Patrimonio Cultural

Los bellos diseños de estilo clásico y moderno de artículos de madera hechos a mano por grandes artistas, motivó a la Asamblea Nacional a declarar a la parroquia San Antonio de Ibarra (Imbabura), como “Patrimonio Cultural y Artístico del Ecuador”.

Esta parroquia está ubicada a 5 kilómetros de la ciudad de Ibarra y a 174 kilómetro de Quito y se llega por la Panamericana Norte. Tiene una población aproximada de unos 17 000 habitantes, de los cuales 3 000 personas trabajan en obras confeccionadas en madera. Ellos provienen principalmente de los barrios Santo Domingo, Tanguarín, Santa Clara, San Antonio, Chorlaví y Bellavista. El otro porcentaje en producción agrícola, textil y servicios.


Se dice que la actividad artesanal de San Antonio comenzó en 1880 con la creación del Liceo Artístico, una especie de escuela- taller que impartía conocimientos y práctica en pintura, escultura, tallado, y carpintería. En la década de 1950 aparecen figuras costumbristas diversificándose la producción para consumo de los visitantes.

Alonso Remache, con 64 años de edad y 26 como escultor de figuras religiosas, comenta que se inició como ayudante de poligrafiado (pintura de las esculturas con pan de oro). Hoy dirige su propio taller ubicado junto a los expositores de arte y artesanía “San Antonio”.

Luis Freire, reportero de Esmeraldas Digital, en la visita a
uno de los talleres artesanales de San Antonio de Ibarra

Cada obra varían sus precios desde $50 hasta $2 000, dependiendo del pedido o la exigencia del cliente. En la actualidad unos 120 socios que tienen sus talleres propios, también ubicaron almacenes para la venta directa al público.

Desde hace unos seis años, San Antonio de Ibarra, se convirtió en la principal línea comercial de muebles que llegan a Quito, Cuenca, Ambato y Esmeraldas. Las ferias del mueble y artesanías atraen a turistas europeos, de los EEUU y Colombia, quienes prefieren estas artesanías, manifestó David Fuentes, propietario de uno de los almacenes ubicado en la calle Veinte y Siete de Noviembre.

Los muebles y esculturas son tallados en madera de cedro, nogal, pino, roble y olivo, que están desapareciendo por la tala acelerada de los bosques para las grandes industrias, manifestó. A estos se suma los trámites burocráticos para conseguir créditos del Banco Nacional de Fomento (BNF).

Por este motivo se agremiaron para tener su propia micro empresa y la Junta Nacional del Artesano, se encargó de acreditarlos como artesanos profesionales, que es un requisito básico para ser sujetos de créditos de alguna financiera o entidad bancaria.

La Asamblea exhortó al Gobierno, a través del ministerio de Cultura y del Instituto de Patrimonio Cultural, para que destine los recursos económicos de manera preferente. Además, diversas actividades para que San Antonio de Ibarra, continúe su labor artística y artesanal, como parte de su historia.

También solicitó a los ministerios de Relaciones Exteriores, Comercio e Integración y Turismo, promover a este región, en diferentes eventos culturales, ferias y exposiciones locales e internacionales.(Luis Freire)