jueves, 3 de noviembre de 2011

San Martín de Porres, el Santo Negro que une a los pueblos del norte de Esmeraldas

Unos cinco mil feligreses concentró la procesión de San Martín
(Fotos Luis Freire)
Miles de devotos arriban en botes y grandes embarcaciones hasta el puerto fluvial de Limones, en Eloy Alfaro, norte de Esmeraldas. También los grupos de marimba lo hicieron en barcazas adornadas con hojas de palma, bambú y otros materiales.

Mientras en una gabarra especial se esperaba el arribo de la efigie de San Martin de Porres (El Santo Negro), para la tradicional procesión acuática hasta el poblado de Canchimalero, que se realizó este 3 de noviembre.

Alfredo Defáz, ibarreño residente Limones, es el presidente del comité de fiestas de San Martín, hace 16 años. Con megáfono en mano y con la ayuda de miembros de la Armada, se organiza la procesión que dura unos 20 minutos de travesía marítima entre Limones y Canchimalero.

En tanto los cantos, arrullos, alabaos, son entonados por grupos de marimba que arriban de diferentes poblados de Mataje (Colombia), Eloy Alfaro y San Lorenzo del Pailón.

También Papá Roncón, Petita Palma y decimeros se unen con sus cantos en medio del jolgorio, lanchas que ocasionan fuertes oleajes y un sol radiante para los feligreses.               

En Canchimalero unas veinte mujeres afroesmeraldeñas esperan la imagen de San Martín en el filo de la playa. Yadira Arroyo, una de las devotas que deseaba cargarlo en hombros como agradecimiento por resolverle un problema legal a su hermano en 2010.

En tanto para Daniel Bartolomé, español, era la primera vez que participaba en una fiesta religiosa esmeraldeña, que este año concentró unas cinco mil personas.

Al arribo de las barcazas con dos imágenes de San Martín de Porres, sus ocupantes lanzan caramelos, dulces, ciruelas y mandarinas a la gente que espera en la playa, para la procesión.

El obispo Eugenio Arellano y otros seis sacerdotes bajan de la embarcación con Luis Falconí, Narcisa Cárdenas, viceministros del Ministerio de Turismo, el gobernador Lenin Lara; Richard Mina, alcalde de Eloy Alfaro y otras autoridades.

Imagen de San Martín de Porres, por las calles de Canchimalero
Las mujeres son las primeras en ingresar al mar para recibir a San Martín y ubicarlo en sus hombros o agarrar una cinta que lo adorna. Los feligreses pugnan por estar en primera fila en medio de empujones de la policía y coordinadores que abren paso entre la multitud.

“Canchimalero, Canchimalero, recibiste a tu San Martín”, es el canto principal de los marimberos que se confunde con la música salsera y vallenatos de los puestos de comida y bares móviles instalados para esta fiesta.

La procesión avanza la única calle polvorienta de este poblado hasta la iglesia ubicada a unos 500 metros de la playa. Antes de llegar las dos imágenes hasta la tribuna para la misa campal, los devotos dan tres vueltas en círculo con San Martín.

Defáz dice que de esta manera se le demuestra al Santo Negro, la alegría de los feligreses y visitantes. Mientras en el interior de la capilla se encienden cientos de velas en el piso aunque el sarcedote de la localidad lo prohíbe.

“Cada cirio es por petición o agradecimiento por un milagro”; manifestó Elodia Caicedo, quien con la cera caliente se la pasaba en la pierna derecha porque sufre de reumatismo.

La mayoría de las velas las pasan primero por la efigie de San Martin con el pedido solicitado por el devoto. Esta fiesta tradicional se celebra desde hace unos 27 años porque en la playa de Canchimalero fue encontrada una imagen de San Martín por Aurelia Mosquera, moradora de esta localidad.

Canchimalero, requiere de obras

Esta localidad de 200 familias necesita de muro de contención para enfrentar los oleajes, puente peatonal de 800 metros de longitud, agua potable y alcantarillado sanitario.

La mayoría de la gente se dedica a la pesca artesanal, huertos familiares, sembrío de frutas o como trabajadores en Limones, que está ubicado a unos10 minutos por vía fluvial.

El Ministerio de Turismo les construyó un centro gastronómico y adecentó la iglesia por un monto de $67 000. El centro turístico fue entregado mediante convenio al alcalde de Eloy Alfaro, Richard Mina.

El Primer Personero insistió en la construcción de la carretera Limones – La Barca, ya que a esta población  solo se llega por vía fluvial o marítima. (JLF)

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