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| Daño físico en la carretera Esmeraldas - Quinindé, sector Tahigüe (Foto Luis Freire) |
Las
lluvias y el volumen de tierra derrumbada impiden habilitar un tramo de la
carretera Esmeraldas – Quinindé, que colapsó desde el 25 de abril pasado por la
rotura de una alcantarilla antigua.
El
daño vial se encuentra en el kilómetro 33, cerca de la población de Tahigüe,
donde se trabaja en la remoción de tierra para hacer una nueva variante,
manifestó Mabel Endara, directora provincial del MTOP.
El
deslizamiento fraccionó una alcantarilla metálica de 500 milímetros y un tramo
del asfalto en una extensión de 25 metros.
Maquinaria
pesada y volquetes de la compañía Herdoiza – Crespo, movilizan la tierra a otro
sector y tiene habilitado un tramo de los dos carriles de la vía con paso
restringido.
Endara
explicó que el tramo existente se lo debe cerrar por su ubicación junto a una
falla y la ladera que ocasionó el boquete de gran profundidad.
La
funcionaria recomienda a los transportistas respetar las señales ubicados en
los dos tramos de la vía en una extensión de 150 metros, para evitar accidentes
con la maquinaria.
En
los 91 kilómetros de la carretera Esmeraldas se han realizado tres variantes en
la ampliación de esta vía, por inestabilidad de las lomas y humedad del
terreno. También ha generado daños en el sistema eléctrico que obliga al cambio
de postes y redes, dijo de su lado Roberto Torres, nuevo gerente de la CNEL
Esmeraldas.(JLF)
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