miércoles, 28 de septiembre de 2011

Un año de espera de ofrecimientos para familiares de los caídos el 30-S

Mariana Jhayya, madre de Jacinto Cortez (Fotos Luis Freire)
Fotos, condecoraciones, diplomas de los cursos de ascenso, ubicados sobre una mesa de madera, son los recuerdos que se exhiben del Cabo Segundo de Infantería de Fuerzas Especiales, Jacinto Cortez Jhayya, asesinado hace un año en el rescate del presidente de la República, Rafael Correa.

Su madre Mariana Jhayya, no quiere hablar sobre el tema con periodistas o personas desconocidas. “Algunos han tergiversado mis declaraciones por exigir que el Gobierno cumpla con lo ofrecido para los familiares de los muertos en la revuelta”, dice.

A ella también le ofrecieron una vivienda nueva, un empleo estable y la pensión vitalicia. Desde hace dos meses se cambió de su casa propia ubicada en la avenida Los Quinches, en la cooperativa Asistencia Municipal Dos, un barrio periférico de Santo Domingo de los Colorados.

El motivo fue que la casa se cae a pedazos y con lo poco que gana con la venta de cosméticos, ropa y otras actividades, junto a sus dos hijas Sandra y Mercedes, están reparando la vivienda.

En la actualidad arrienda una casa en $50 ubicada en la calle Jorge Icaza, a cuatro cuadras de su residencia propia. Comenta que ha recibido la visita de funcionarios del Gobierno y  llamadas telefónicas, para indicarle que los trámites de los beneficios ofrecidos “están avanzados”.

Conoce que su nuera Consuelo Leones, realiza también sus trámites para la pensión que deben recibir Ricardo y Michael, hijos que los tuvieron con Jacinto.  Ella estaba embarazada de dos meses cuando su esposo falleció en el enfrentamiento con la policía en el Hospital de la Policía, donde se encontraba el Primer Mandatario.

Incluso, le han pedido el ADN del niño para pagarle el seguro familiar del ISFA.  Mariana requiere de la ayuda estatal por estar desempleada y además separada de su ex esposo Tomás Cortez, militar en servicio  pasivo, con quien estuvo  casada 22 años.

Él le pasaba una pensión de $70 pero desde que su hijo Jacinto ingresó a la Fuerza Terrestre, este asumió los gastos familiares. Cortez cuando tenía 19 años de edad, aprobó el curso de Soldado de Infantería y luego el de Comando  Paracaidista, el 24 de  julio de 2006.

Tumba de Jacinto Cortez, en el campo santo Jardines del Edén
De inmediato ingresó a la  Escuela de Fuerzas Especiales “Cap. Alejandro Romo Escobar” en Latacunga y se especializó en transmisiones y comunicación. El curso a Cabo Segundo lo realizó mayo 20110, en el Fuerte Militar Rumiñahui.


Al hospital de esta una unidad militar fue llevado por sus compañeros, el 30 de Septiembre, luego que recibió  dos impactos de bala.

El 1 de Octubre falleció y su cadáver fue sepultado al día siguiente en la bóveda Z8-1-N-2-06, del campo santo privado Jardines del Edén,  ubicado en la vía Santo Domingo – Quito.

Lorenzo Bravo, empleado de este cementerio, fue el encargado de ingresar el cofre y sellarlo con la bóveda de cemento. “Sus compañeros de arma le rindieron todos los honores militares que me conmovió”, recuerda.

Del informe legista y la exhumación del cadáver que se realizó una semana después, tampoco sus familiares conocen los resultados. La diligencia estuvo a cargo de Marlon Oviedo, director nacional de Medicina Legal de la Fiscalía; Carlos Echeverría y Ney Bravo, peritos de Criminalística; un representante del Ministerio de Justicia.

Además, dos técnicos de la empresa Consultora Pericial, contratados para realizar el examen de balística y Jorge Montero, agente fiscal de Santo Domingo de los Tsáchilas.

Para el sábado en la noche se realizará una misa en recordación a Cortez Jhayya en la actual vivienda donde reside doña Mariana. Mientras su padre solicitó el permiso al alcalde Augusto Barrera, para ubicar una placa donde murió el militar en Quito.

Mariana fue invitada este jueves por el Patronato Municipal de  Santo Domingo, a la marcha en rechazo al 30-S. Se negó a participar porque considera que esta fecha debe ser  de luto y reflexión.(JLF)

Esta noche audiencia de formulación de cargos a sindicados en tráfico de drogas

Para las 22:00 de esta noche se fijó la audiencia de formulación de cargos en contra del comandante de la Policía de Esmeraldas, Galo Carrera y cinco personas más, para investigaciones por tráfico de droga.

La acción judicial se realizará en el Juzgado Tercero de Garantías Penales, ubicado en la Corte Provincial de Justicia. El titular de esta dependencia dispuso el arresto del oficial de  Policía desde las 10:00 de hoy y permanece en el Comando CP-14.

El arresto de Carrera y otros sindicados, entre ellos posiblemente un oficial de las FFAA, se dio luego que agentes de la Dirección Nacional Antinarcóticos (DNA) y el Fiscal de Delitos Mayores de Pichincha, allanaran cuatro viviendas en diferentes sitios de Esmeraldas.

El primer allanamiento se realizó en la sede de la Asociación de Residentes Españoles en Esmeraldas, ubicado en la Olmedo entre Quito y Ricaurte. El segundo operativo fue en una finca en Tachina.

Extraoficialmente se conoció del decomiso de media tonelada de droga y estaba previsto nuevos allanamientos. Una fuente policial, desmintió que al comandante Carrera se le haya encontrado alcaloides en su poder.

Antinarcóticos realizaba operaciones de inteligencia desde hace varios días en Esmeraldas. En agosto de 2009, fue asesinado Luis Villafuerte, ex jefe de la Policía de Quinindé (Esmeraldas) y el policía Juan Shuma, cuando transportaban 273 kilos de droga.

El hecho ocurrió en el sitio Las Orquídeas, en la vía Saracay-Balsas, perteneciente al cantón Balsas. Mientras que 1 187 plantas de coca fueron destruidas y quemadas por personal del Batallón de Infantería de Marina de San Lorenzo (Binlor 11).


Las plantas se encontraban en un vivero ubicado en la localidad de La Chiquita, parroquia Ricaurte, sector fronterizo del cantón San Lorenzo con Colombia. (JLF)