martes, 1 de noviembre de 2011

Cadáveres de la familia Suárez Maridueña, fueron llevados a Guayaquil

Aún no hay pistas del asesinato de cuatro personas de la familia
Suárez Mardueña, asesinados en Santo Domingo (Fotos Luis Freire)
Los cuatro cadáveres de la familia Súarez Maridueña, asesinados en su vivienda el pasado fin de semana, fueron retirados esta mañana del cementerio central de Santo Domingo de los Colorados.

Sus familiares arribaron desde la tarde del lunes para los trámites legales y alrededor de las 10:00 fueron sacados en cofres y embarcados en un camión con rumbo a Guayaquil.

Ninguno de ellos se pronunció sobre lo ocurrido a Robín Suárez (58 años), su esposa Gladys Maridueña (55) y sus hijos Robín (32) y Mauricio (17). Geovanny Arguello, oficial de la PJ, fue quien comunicó telefónicamente a sus familiares de las cuatro víctimas.

También se extendió las investigaciones a Rosaura Rodríguez, amiga de los fallecidos y quien descubrió los cadáveres. Los cuatro fallecidos se los encontró boca arriba en el piso de la sala principal.

Ella llegó para manifestarles que necesitaban dinero para comprar materiales para la casa en construcción de esta familia, en la Amazonía.

Tres de ellos tenían un disparo en la sien derecha y la cuarta víctima varias puñaladas en la espalda. Antes de ejecutarlos fueron amarrados las manos hacía atrás con cordones de cortinas y sábanas.

Según los agentes policiales, serían unas cuatro personas que participaron en el asesinato y que utilizaron pistolas 9mm con silenciadores con almohadas y mochilas.

Vecinos de la urbanización El Girón, se sorprendieron del cuádruple asesinato y de no haber escuchado nada inusual en la casa de los Sánchez Maridueña.

“Eran personas reservadas que salían a tempranas horas y regresaban en la noche. A veces se los veía cuando lavaban los carros  de su propiedad”, dijo uno de los vecinos. Desde hace tres años llegaron de Guayaquil y compraron una casa en Santo Domingo.

Robín Suárez y su esposa Gladys, son abogados, pero en la provincia Tsáchila se dedicaron a  la venta de joyas, bienes raíces y un local comercial. En Quevedo (Los Ríos), también tenían otra propiedad.

Mientras su hijo Robin, estudiaba en  Quito y Mauricio, en una Unidad Educativa a Distancia en Santo Domingo, por su discapacidad motriz.

Otro vecino indicó que en la madrugada llegaban personas a la vivienda y salían enseguida. La policía y la fiscal Irma Bosques, descartan el robo ya que se encontraron todas las pertenecías y enseres aunque algunos muebles movidos, posiblemente por el forcejeo durante el asesinato.

El dato

En Santo Domingo de los Colorados han sido asesinadas dos familias más en circunstancias similares. La primera fue  los Churiquima – Tumbaco y su empleada, el 6 de octubre de 2009.

La otra fue los familiares del policía Víctor Muñoz Mera, su esposa y dos hijos, en la parroquia El Esfuerzo, el 31 de diciembre 2010. (JLF)

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