El Comercio.com
La solución al conflicto territorial entre Esmeraldas y Pichincha por La Concordia parecía haber llegado a su fin hace cuatro años. En ese entonces, el Congreso Nacional resolvió que esa jurisdicción -que había hecho tantas paralizaciones y cierre de las vías- para presionar por una solución- era parte de Esmeraldas al convertirse en su octavo cantón. En ese mismo año (2007), Santo Domingo de los Tsáchilas consiguió lo que tanto había anhelado por más de 35 años: la provincialización y su independencia de Pichincha.
Esas dos resoluciones zanjaron supuestamente la pelea. No fue así. La nueva provincia costeña revivió el enfrentamiento al reclamar ese territorio. La consulta popular del 5 de febrero pudiera poner punto final a esta histórica disputa. Líder Olaya, de Santo Domingo, y Diógenes Cuero, de Esmeraldas, conocedores del largo conflicto, analizan el porqué La Concordia les pertenece.
Las autoridades y organizaciones de las dos provincias iniciaron este sábado la campaña para incidir en los resultados de la consulta.
El Movimiento Popular Democrático está a la cabeza en Esmeraldas y Alianza País lo hace desde Santo Domingo. ‘La Concordia y Santo Domingo nos parecemos’ Redacción Santo Domingo
¿Por qué Santo Domingo de los Tsáchilas reclama el cantón La Concordia? Las tierras tienen una historia común en el proceso de construcción social. Los colonizadores de Santo Domingo también son de La Concordia. Tenemos costumbres parecidas. Además, existe una cercanía entre los dos territorios que permitirán mayor agilidad y disminución de costos en los trámites y gestiones.
¿Qué beneficios en concreto obtendría La Concordia si llegara a formar parte de Santo Domingo? En el ámbito político, La Concordia tendría mayor peso porque el Alcalde sería parte de la Cámara Provincial. Y dos de los tres presidentes de las juntas parroquiales serían consejeros en el Gobierno Provincial.
Esto influiría en la toma de decisiones. ¿Y en cuanto a obras de infraestructura básica? Se mejoraría la cobertura de servicios que Santo Domingo le brinda a La Concordia, a través de empresas públicas. Habría una planificación vial concreta y se atenderían temas de educación y productividad agrícola. ¿Cómo ha contribuido Santo Domingo en el desarrollo de La Concordia? Con la prestación de servicios como electricidad y telefonía fija. Además se ha acogido a los concordenses en los centros de salud e instituciones educativas de la provincia. ¿Qué ganaría Santo Domingo si gana en la consulta?
Se reorganizaría la planificación vial. Sería más fácil conectar a Santo Domingo con Manabí, a través de parroquias como Valle Hermoso y San Jacinto. Además, obtendría mayores ingresos por el territorio y la densidad poblacional en el ámbito de presupuestos nacionales. ¿Cuánto dinero? Se debe calcular en función de lo que establece la Ley. Pero el mayor beneficio económico sería para La Concordia. Vamos a suponer que, por concepto de la incorporación de La Concordia, el Gobierno Provincial recibe USD 2 millones. Ese dinero se lo invertirá solo en La Concordia, en la creación de obras fundamentales. No se repartirá a otras jurisdicciones, como ocurre en la actualidad con Esmeraldas.
¿Cómo podría Santo Domingo garantizar mejores condiciones a los concordenses si es una provincia con una administración pública nueva, que no ha podido aún responder a las necesidades de sus pobladores? Es cierto que con la anexión de La Concordia no se solucionarán los problemas de ambos territorios, pero nos potenciará en la forma de obtener soluciones compartidas. Es cierto que, durante 40 años, Santo Domingo ha tenido problemas sin resolver pero hay condiciones políticas para empezar a caminar en otra dirección y saldar esa deuda social. ¿Qué intereses políticos se mueven en la consulta?
Existen tendencias políticas en ambas provincias. Esmeraldas con el MPD y La Concordia y Santo Domingo con sectores que defienden la tesis de Alianza País. Pero me parece que hay factores más importantes como los temas históricos. El conflicto de pertenencia no puede continuar. La consulta es uno de los mecanismos de democracia directa que nos permitirán resolverlo. Una de las tendencias políticas deberá imponerse al final, ¿qué pasará luego entre los actores sociales? Los resultados harán que las autoridades bajen las discusiones y el nivel de confrontación. ¿No resulta ingenuo pensar que no habrá confrontación? Al final todos entenderán que la concertación es lo mejor para La Concordia.
Así se podrá trabajar más en el mejoramiento de la calidad de vida de la población. La Concordia debe entender la pertenencia a Santo Domingo como una oportunidad para cambiar. Y los ciudadanos, en su libre derecho, podrán pensar en nuevas candidaturas y puestos políticos. Finalizada la consulta, ¿qué hacer para que la relación entre las dos provincias no quede trastocada? Los sujetos y actores políticos deberán asumir la consulta con mucha madurez y responsabilidad en este corto tiempo de campaña (20 días). Debería haber características de paz, armonía, deliberación y debate fundamentado.
La violencia y la pedrada no deben reinar en esta consulta. ¿Cómo lograrlo? Cuando los resultados se conozcan oficialmente se debe avanzar en una dirección de diálogo. Habrá que trabajar en una mancomunidad no solo con Esmeraldas, sino con Pichincha y las demás provincias de la región. Esa es la única garantía para prosperar. ¿Qué representa Esmeraldas para Santo Domingo? Se debe dejar en claro que al territorio de Esmeraldas lo amamos porque es un patrimonio turístico del Ecuador, del cual estamos orgullosos. HOJA DE VIDA Líder Olaya Su experiencia. Es psicólogo. Tiene posgrados en Mediación, Planificación para el desarrollo y Gestión en desarrollo social. Su punto de vista. La Concordia debe pertenecer a Santo Domingo de los Tsáchilas para que se puedan atender los problemas estructurales de la ciudad.
‘Esmeraldas no tiene conflicto de pertenencia’
Redacción Esmeraldas
¿Por qué La Concordia debe mantenerse como territorio de Esmeraldas? Fue creada como cantón de esta provincia con límites bien definidos y pertenencia. Los argumentos para reclamar esa jurisdicción son legales. El Congreso Nacional aprobó el proyecto limítrofe el 20 de noviembre del 2007 y, el 26 de mismo mes y año fue publicado en el Registro Oficial. ¿Qué beneficios tendría La Concordia si en la consulta gana la tesis de Esmeraldas? Se seguiría atendiendo a la población, con los recursos disponibles. El problema es que no hay una verdadera distribución de la riqueza estatal para los sectores más desprotegidos. Si a las provincias les entregaran los recursos económicos en función de sus aportes, todo fuera distinto.
Esmeraldas tiene una participación importante, pero eso no se ve reflejado en las rentas que reciben los cabildos. El desarrollo de sus comunidades es truncado. ¿Cómo han aportado las autoridades esmeraldeñas al desarrollo de La Concordia? La Prefectura ha tenido gran presencia con obras de infraestructura básica, especialmente en la zona rural. Se han hecho caminos, puentes y se han apoyado proyectos productivos. Pero hay un Municipio de oposición que no ha permitido más avances en la zona urbana, que es de su competencia. En algún momento se pensó que con el Cabildo mejorarían las condiciones de vida de sus habitantes, pero no ha sido así en la práctica. Ganar la consulta podría abrir el camino para que nuevos líderes esmeraldeños asuman esas responsabilidades.
¿Cómo se afectaría a Esmeraldas si la opción de Santo Domingo se impone? No quisiera abocarme a eso. Las autoridades no deben prestarse para participar en el proceso electoral. Aceptar la consulta implica deslegitimar lo que es mío. Entendido así, lo que es mío no puede estar en disputa, pues, en derecho me pertenece. En este caso hay ilegalidad e injusticia con Esmeraldas, porque el territorio de La Concordia está legalmente reconocido. ¿No es justo que los pobladores decidan a qué territorio quieren pertenecer? Lo sería si existiera un conflicto de pertenencia. Pero no es el caso. En realidad, a Santo Domingo le falta mayor territorio para armar sus jurisdicciones y quiere hacerse del cantón más cercano. ¿Si La Concordia va a Santo Domingo de los Tsáchilas, qué pasaría con las rentas de Esmeraldas?
Se perderían porque es una zona altamente productiva. Pero hay un peligro mayor, que no tiene que ver con lo económico sino con lo social. ¿Cuál? El precedente que se dejará instaurando. Mañana, otras provincias o cantones demandarán ser de uno y otro territorio. Ya está pasando con Imbabura, que nos quiere quitar Las Golondrinas. El presidente Rafael Correa ha manejado esto con mucha irresponsabilidad. Él no entiende que este país debe ser gobernado por leyes y no por intereses políticos.
¿Cuáles son esos intereses? Que a Santo Domingo le podría tocar un legislador más por el número de población y con ese voto se podría influir aún más en la próxima Asamblea Nacional. Alianza País tiene la Alcaldía y la Prefectura en Santo Domingo y necesita desplazar al MPD de Esmeraldas para, algún día, entrar con candidatos propios. Si La Concordia tiene autoridades provinciales afines al Gobierno, ¿eso no podría facilitar la asignación de recursos para obras? De ninguna manera.
Puede ser que el Estado asigne fondos, pero nadie garantiza que lleguen a las personas que realmente lo necesitan. Además, con Santo Domingo habrá más confusión porque todo el aparato público deberá pasar a esa provincia y el caos que se ocasione no podrá resolverse en el corto plazo. ¿Cómo quedarán las relaciones entre ambas provincias tras la consulta? Habrá resentimientos graves entre los dos pueblos como está pasando en Guayas y Santa Elena. No quiero ser agorero, pero Esmeraldas tiene muy arraigada la identidad por su tierra. Tiene historia. Eso no pasa con Santo Domingo, que se hizo de inmigrantes. Los actores políticos deben tener la responsabilidad suficiente para no motivar más enfrentamientos. ¿Cómo lograrlo? La población debe jugar un papel importante. No debe dejarse llevar por pasiones. Este es un tema jurídico e histórico.
¿Por qué histórico? La Asamblea Constituyente de 1947 marcó los límites entre las provincias de Esmeraldas y Pichincha. Entonces se estableció que los sectores que hoy corresponden a Las Villega, Monterrey, Bocana del Búa, La Concordia y La Independencia pertenecen a la ‘Provincia Verde’. HOJA DE VIDA Diógenes Cuero Su experiencia. Es escritor y docente en la Facultad de Jurisprudencia de la Universidad Luis Vargas Torres, en Esmeraldas. Su punto de vista. Cree que la consulta popular en La Concordia alentará enfrentamientos por el territorio en otras provincias. (Diario El Comercio)
